Viernes , quinto día consecutivo de gimnasio. Y después a corretear por la candamia.

Hoy quería hacer 4 km, y no pude, lo cual me demuestra, que la cabeza me empuja más, de lo que el cuerpo puede. 

Y me he propuesto hacer caso a mi cuerpo. Así que como no soy un gurú de esos que nos venden el poder de la mente, pare.

En concreto hice , 3,51 kilómetros, a 7,9 km/h, porque sigo sin saber poner mi GPS en min/km.

Sigo despacio, pero cada día algo mejor.

No me marcó más objetivo que disfrutar cada vez que corro, escuchando a mi cuerpo, al ritmo que le de la gana a mi cuerpo, y sin escuchar mucho a mi cabeza, que me empuja a hacer más.

Repite conmigo, querer no es poder, hay muchas veces que quieres y no puedes, y hay que ser valiente para reconocerlo e ir más despacio.

No, no y no, solo pienso escuchar a mi cuerpo y sino puedo más, no pienso forzar.

Calma total.